¡Así es la vida!

Desde el 1946 cuando un cinco de enero murió con tan sólo cuarenta años el barítono Eduardo Brito, en ese entonces el artista más destacado de República Dominicana en los escenarios internacionales, los dominicanos recibimos el nuevo año con alegría y una efeméride luctuosa.

Es innegable que nos embargue una sensación de pena cuando fallece un familiar o amigo, pero cuando sucede con un artista, aún no se tenga relación de amistad personal con él, tenemos esa misma sensación porque de verlo en espectáculos y oírlo en discos nos parece un amigo cercano.

Este martes cinco murió a muy temprana edad, 47 años, el destacado músico Pachy Carrasco, representante de una generación de artistas nuestros creadores de grandes éxitos y arreglos sensacionales, también falleció el comediante Johnny Puesán.

Nos sobrecoge el tener que tocar temas como estos, porque todas las muertes son lamentables, ya quisiera uno que no sucedieran pero ¡así es la vida!