Con la primavera, además de la llegada del colorido floral también nos llegan dos celebraciones relacionadas con la estación, dos días especiales para acentuar la defensa de lo que nos da vida, los árboles y con ellos el agua.
Este veintiuno de marzo es el día especial dedicado a la foresta, a los bosques, por tanto, es esencial que por lo menos cada uno de nosotros siembre un árbol y eduque sobre su importancia, no tan sólo a niños y jóvenes, sino también a adultos que les gusta cortarlos.
Mañana miércoles veintidós, está dedicado al agua, que es vida y que debemos y podemos proteger para seguir viviendo, una cosa lleva a la otra, los bosques al agua. Las partes deforestadas de cada pueblo o región están completamente secas porque sin árboles se va muriendo el agua.
No esperemos la celebración de un día especial para dedicarnos a pensar y a cuidar lo que la Naturaleza nos brinda de forma gratuita y que nos permite vivir ¡Bosque y Agua!