¡Locura, Locura!

Hace tiempo que cada día que pasa nos está trayendo noticias que nos impactan de una manera tal, que en ocasiones sentimos como si estuviéramos viviendo en un mundo de locos, de irascibles e intolerantes que no aceptamos, la opinión contraria, ni el derecho ajeno.

Lo que está sucediendo es en todo el planeta, aunque tal vez suceda más un país que en otro, podrían esgrimirse muchas condiciones para explicar porque pasan, pero la libertad de la naturaleza humana, para elegir es lo primordial.

Tenemos consumo y venta de drogas a niveles alarmantes, venta de armas de fuego y blanca, como si fueran juguetes, una internet que brinda la facilidad que para todo el mundo diga y haga lo que quiere, es especial, denigrar y fomentar maldades, aunque tiene muchas bondades.

En nuestro país, hemos visto en unos pocos días muertes producidas por fanatismo político, por deudas económicas, por un simple choque de vehículos, por discusiones en un juego de Dominó y por otras nimiedades, pero todo esto demuestra entre otras cosas, la proliferación de armas de fuego.

A veces dejamos pasar actuaciones que en su momento encuentran defensores que las comparan con otras de mayor gravedad, pero que esas que aparentan simples, por no condenarse, se vuelven graves, ejemplos hay por montones.

Estas muertes que se han producido en estos últimos tres días, no tienen justificación, ninguna muerte la tiene, sólo cuando Dios así lo quiere, debemos sentarnos a reflexionar y hacernos el propósito de parar estas situaciones que no son más que actos de ¡locura, locura!