UNICEF estableció en el 2012, el 12 de febrero como el Día Internacional contra el Uso de Niños Soldados, con el fin de sensibilizar a miles de personas frente a este problema social. Según la UNICEF, se calcula que hay unos 300.000 niños y niñas soldado en más de 14 conflictos armados en todo el mundo.
Entre las definiciones aceptadas por la Real Academia Española, un niño es quien tiene poca experiencia, que obra con poca reflexión y advertencia. Con esto, podemos decir que un niño es vulnerable, y por lo tanto tiene que ser guiado y educado hacia el bien. En muchas partes del mundo, esta vulnerabilidad es aprovechada para vincular a miles de niños a la esclavitud, a la sumisión, o para utilizarlos dentro de conflictos armados.
Como niño soldado, se debe comprender a cualquier menor de 18 años que es o ha sido reclutado por un grupo o una fuerza armada. Dentro de este, el niño es obligado a desempeñar cualquier rol dentro de las filas: participación en los combates, terrorista, cocinero, espía, o con fines de explotación sexual. Hoy, los niños soldados constituyen uno de los casos más graves de explotación infantil.
Muchos niños son secuestrados y obligados a unirse a ciertos grupos armados, otros se unen en consecuencia de la pobreza, los malos tratos, la presión de la sociedad o el deseo de vengarse de la violencia ejercida contra ellos o sus familias. En muchos países en guerra, las cuales son cada vez más brutales y largas, como Siria, Yemen, Sudán del Sur, República Centroafricana, Nigeria y muchas otras, los niños se convierten en presas fáciles, víctimas inocentes de las atrocidades de la guerra.
UNICEF trabaja en muchos países para detener este problema social, ayudando a la liberación de miles de niños reclutados. Los niños soldados tienen la misma necesidad de sentirse amados, atendidos y seguros que otros niños. Pero han vivido experiencias excepcionales que le acompañarán durante el resto de sus días. La reintegración es un gran desafío, ya que estos niños sufren grandes traumas físicos y psicológicos irreversibles, dificultando el regreso a su vida normal y la recuperación de su infancia. A esto se le puede sumar el sufrimiento por la pérdida de su familia, la falta de identidad, el rechazo de la sociedad, y la falta de educación.
“A miles de niños se les roba su infancia obligándoles a combatir en conflictos armados. Detengamos este crimen abominable” fue la invitación del Papa Francisco en el Día Internacional contra el uso de Niños soldados. “Siento con fuerza el dolor por los muchos niños arrancados a sus familias para ser usados como soldados. ¡Ésta es una tragedia!”, escribía también Francisco en un tweet, en el Día Internacional contra el uso de niños soldado del año 2018.